Muchos cultivadores, sobre todo en sus primeros cultivos de marihuana, cometen algunos o varios de los siguientes errores:
✖ Regar con poca agua y muy frecuentemente
✖ Regar con exceso de agua con mucha distancia entre riegos.
✖ Regar con exceso de agua y con mucha frecuencia.
✖ Riegos con poca agua y poca frecuencia.
✖ Riegos sin regular pH y EC.
✖ No utilizar fertilizantes al regar.
¿Cómo?, ¿Cuánto? y ¿Cuándo regar? es crucial para el rendimiento del cultivo ya que es determinante en absolutamente todos sus procesos fisiológicos.
Como regar marihuana puede ser confuso, en este artículo te damos los tips precisos para que riegues y obtengas el mejor rendimiento.
Guía práctica de riego para el cultivo de marihuana
¿Cómo regar?
Para definir cómo regar es importante en primer lugar considerar la calidad del agua. Se recomienda utilizar agua filtrada libre de cloro y sales. Si no se cuenta con un sistema de filtración adecuado, es recomendable dejar reposar el agua por 2-3 días antes de utilizarla de modo que se evapore el cloro y decanten algunas sales.
Además, se debe regular el pH manteniéndolo entre 5.5 – 6.5 según la etapa del cultivo, para no afectar la solubilidad de los nutrientes.
En el mejor de los casos un sustrato tendrá los nutrientes necesarios para máximo las 3 primeras semanas de cultivo, por esto se deben incorporar fertilizantes al menos riego por medio durante el crecimiento vegetativo y en todos los riegos cuando la planta esté en floración.
(Ver artículo «El sustrato; la base de un cultivo exitoso«)
Otro factor a tener en cuenta, es la EC (Electroconductividad) que para la marihuana el rango adecuado es 0.8 a 2.2 uS/cm, el cual dependerá de la etapa en que se encuentre el cultivo. Para la medición de este factor utilizaremos un medidor de EC.
¿Cuánto regar?
Para saber cuánta agua se usará para el riego de marihuana o cualquier otra planta, es importante fijarse en los agujeros de drenaje de la maceta. Se debe regar hasta que la maceta comience a gotear, esto nos muestra que el suelo se encuentra saturado de agua.
Otra manera de calcular el volumen de agua de riego es regar con un 10 a 12% de la capacidad de la maceta (Para sustratos nuevos considerar un 15%), por ejemplo:
- Para una maceta de 7L; multiplicamos 7 * 0.1 – 0.12 obteniendo como resultado 0.7L – 0.84L, lo que equivale de 700 a 840 mL, respectivamente.
- Siguiendo el método de cálculo anterior para una maceta de 11L utilizar 1.1L – 1.32L
- Entonces, para una maceta de 18L utilizar 1.8L – 2.16L
¿Cuándo regar?
Establecer una frecuencia fija de riego no es recomendable ya que los requerimientos de agua que tenga la planta van a depender de muchos factores, como: temperatura, tamaño de la planta, tamaño de la maceta, entre otros.
Para determinar cuándo regar (frecuencia) debemos introducir los dedos a 5 cm de profundidad aproximadamente, sacar una pequeña muestra de sustrato y moldear una pequeña pelota. Así podríamos encontrarnos con 3 situaciones:
- La muestra se moldea fácilmente como si fuera plasticina y al apretarla se mantiene unida, lo que significa que contiene un exceso de agua, por lo tanto, no debemos regar.
- La muestra puede ser moldeada, pero al apretarla se desarma en pocos fragmentos (friable). Entonces, el sustrato se encuentra con la humedad ideal. En este caso debemos estar atentos al riego.
- La muestra es moldeada con dificultad y se deshace en muchos fragmentos. Es cuando debemos regar de inmediato.
Por último, se aconseja regar en condiciones de oscuridad o cuando las temperaturas son más bajas durante las primeras horas de la mañana o en la tarde cuando las temperaturas descienden.
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